Final cruel para un Cambados que plantó cara al Compostela

El Club Juventud Cambados vivió su gran prueba de fuego en Tercera RFEF. Los de Pénjamo visitaron la capital gallega para medirse al gran aspirante al título, el SD Compostela. Un enfrentamiento en el que los puntos se decidieron en un tiempo de descuento condicionado por la expulsión de Alberto Lago que dejó a los visitantes con 10 jugadores. Finalmente, los cambadeses no pudieron romper la racha de un Compostela invicto que vuelve a sumar de tres con un electrónico de 2-1.

Los de Secho comenzaron dominando, y cuando tan solo transcurrían cuatro minutos de partido, un disparo lateral desde la frontal del área firmado por Carlos López abría la lata en el marcador. Unos minutos en los que el Compostela salió con muchísima intensidad, teniendo inmediatamente después otra ocasión clara en la que Adrián Armental puso un centro al que Antón Guisande no llegó al remate por muy poco.

El propio Guisande volvería al área de David Conde, pero tampoco tendría éxito con su disparo. Conde dejó una gran intervención en el ecuador de la primera mitad, despejando un remate bajo de Armental tras una contra. Así, el enfrentamiento se fue al descanso con el 1-0 y un Cambados que hacía un gran ejercicio de resistencia ante un rival que no daba margen al error.

Nada más empezar el segundo tiempo, Guisande volvía a poner contra las cuerdas al Cambados, y es que consiguió regatear a David Conde, pero mandó el esférico fuera de posición. Los de Pénjamo se salvaban por muy poco, y es que Valín puso un centro al que Carlos López no llegó por milímetros. El error de los locales pasaba por dejar con vida al Cambados. Así, Diego Iglesias apareció para darle la vuelta al partido y poner las tablas en el marcador.

Lejos de bajar los brazos, ambos continuaron peleando por hacerse con el partido. Los locales parecían ir siempre un paso por delante. Así, Aarón Martínez lograba meterse en el área rival para disparar, pero David Conde estaría preparado para atajar e impedir así que los compostelanos dieran otro golpe sobre la mesa. Los de Pénjamo volvieron a mostrar una gran solidez defensiva, pero no fue suficiente.

Cuando el partido parecía abocado al reparto de puntos, en el tiempo de descuento el colegiado mostró tarjeta roja a Alberto Lago por una falta clara sobre Aarón. En el lanzamiento de dicha falta apareció Pablo Crespo para romper la esperanza cambadesa. En una acción a balón parado, hizo un remate sensacional al segundo palo para poner en el marcador con el 2-1 definitivo.