El rianxeiro que reventó la puerta del piso de su hermana llegó a amenazar de muerte a su familia

El vecino del lugar rianxeiro de Carballeira, F.P.C., de 51 años, que en la tarde del miércoles sembró angustia e incertidumbre al saberse que iba armado con una motosierra, con la que previamente había reventado la puerta del piso de su hermana -está debajo del suyo-, llegó incluso a amenazar de muerte a sus familiares. Así trascendió poco después de que pudo ser localizado en el taller mecánico Bouzada, en Outeiro, en la parroquia de Taragoña, al que fue a recoger el coche que dejara a reparar, y que se sitúa a unos cuatro kilómetros del lugar de los hechos reseñados.
El aviso en un primer momento, concretamente a las 14.40 horas, en que se recibió la alerta de que ese individuo trataba de acceder al domicilio de su familiar, rompiendo la puerta del piso con la motosierra y amenazando a su moradores, justificó el gran despliegue que se organizó, no sólo ya por lo ocurrido, sino por su estado, que hacía temer que pudiera cometer con esa arma algún nuevo intento de agresión o consumarla. Estuvo formado por una ambulancia del 061 con un equipo médico del ambulatorio de la villa, además de por dos patrullas de la Policía Local de Rianxo y dos de la Guardia Civil -una de desplazada de Boiro y la otra desde Noia-, a las que se sumaron cerca de las 17.00 dos unidades de la Usecic.
Ese amplio operativo lo estuvo buscando en un cobertizo de una finca propiedad de F.P.C. en el lugar de Baltar, pero también en otros en los que se podía presuponer que había la posibilidad de que se escondiera, pero fue un aviso de un particular el que poco antes de las seis de la tarde los puso sobre aviso de donde estaba y en donde fue hallado. Tras llevarlo al centro de salud rianxeiro, donde fue atendido por el equipo médico del área de Urxencias y que lo derivó al Clínico de Santiago para una valoración más completa, y a donde fue llevado en una ambulancia con la custodia de una patrulla de la Benemérita. Una vez allí, de madrugada se decidió su ingreso en la unidad de Psiquiatría del CHUS, donde dejó de tener custodia policial.
F.P.C. todavía no está detenido, algo que previsiblemente tendrá lugar cuando le den el alta en la referida unidad hospitalaria. Seguidamente, se le trasladarán a uno de los juzgados de Padrón, donde ayer estaba de guardia el Juzgado de Instrucción Número 1, que no tenía conocimiento oficial del asunto. Eso cambiará una vez que la Guardia Civil de Rianxo le entregue las diligencias que está elaborando sobre lo ocurrido. Por el momento, no trascendieron cuales son los delitos que se le imputarán, pero podría haber uno de daños y otro de amenazas.