Los nombres en las placas, pero no en el Google Maps. El paso que aún le falta a Ravella
El navegador que utilizan millones de personas en todo el mundo todavía no contempla los cambios de nomenclatura.
El proceso burocrático también tiene sus entresijos

Un visitante que no conozca Vilagarcía y que utilice el Google Maps para acercarse a una de las nuevas calles renombradas lo tendrá difícil. Ni Clara Campoamor, ni Maruja Mallo ni la Rúa do Río aparecen todavía en un navegador utilizado cada día por millones de personas en todo el mundo. Es cierto que la oficialización de estos nuevos nombres entró en vigor el pasado 1 de septiembre, pero el camino burocrático que le queda todavía a la administración local por recorrer es largo. Y no solo a Ravella, sino también a las personas que viven en domicilios ubicados en esos viales o los negocios que tienen toda su información en internet basándose en nomenclaturas ya pasadas. Eso sí, algunos servicios ubicados en Clara Campoamor ya han actualizado su ficha en Google, por lo que seguramente otros le seguirán la estela en las próximas semanas.
Desde el Concello ya habían advertido que estos cambios de nombres son latosos y que se informará a los afectados para que la modificación pueda ser paulatina en la documentación y también de cara a servicios como Correos o el Catastro.
Otros nombres
Cabe recordar que el cambio de nomenclatura – sobre todo para dar cumplimiento a la Ley de Memoria Democrática– no solo afecta a lo que es Clara Campoamor (antiguamente Conde Vallellano) o a Rey Daviña (que ahora se llama Rúa do Río), sino a un total de quince viales en todo el término municipal.
Así pues lo que era Fariña Ferreño es ahora Maruja Mallo y General Yagüe (en Trabanca Sardiñeira) es ahora Luis Pando. Ocurre lo mismo con Rivero de Aguilar, que ahora es Laureano López Paratcha. Por su parte los vecinos de lo que era Almirante Fontán tienen que habituarse ahora a dar su dirección en la calle Serafín Ameijeiras.
El problema es bastante menor en aquellas calles que hasta ahora no tenían nombre –con la consiguiente problemática también para determinados servicio de reparto– y que ahora sí lucirán una placa con una designación adoptada por el pleno de la Corporación.
Es el caso de la calle Carmen Meaños “A Carrilla”, que baja hacia el cementerio de Carril y que no tenía nombre. También otras como la Rúa da Lagoíña (en Sobradelo) designará a la calle que va directa al pabellón Sara Gómez. Ninguna de ellas aparece todavía en el Google Maps. El proceso para estar bien referenciado en esta plataforma mundial no es tan complicado.
De hecho cualquier usuario –aunque mejor ese el propio Concello– puede reportar el cambio seleccionando la calle. Además a través de Google Maps Platform Ravella pueda solicitar modificaciones oficiales. La rapidez de los cambios depende, aunque Google Maps parece no ser de las plataformas más inmediatas.
En todo caso las placas físicas, esas sí, llegarán en las próximas semanas a todos los viales de la ciudad.
