El Ribadumia logró ayer una importante victoria en casa, en el partido frente al Estudiantil que había sido aplazado por Covid en la escuadra visitante. Un 2-0 que vale más que tres puntos y que consolida el también buen resultado del sábado ante el Arzúa.
El partido comenzó con intensidad por ambos bandos, pero pronto quedó encarrilado para los aurinegros. Fue a gol de Rubén Cerqueiras, en el minuto 13. Tras una buena jugada, Charles puso la bola a Cerqueiras, que batió con comodidad a Christofer con un lanzamiento cruzado y raso.
Los visitantes no perdieron la concentración y fueron ganando en juego, llegando al área en varias ocasiones. Sebas llegó a probar a Pazos y el Estudiantil tuvo el empate en otro lanzamiento bajo palos. Dos jugadas más pusieron el peligro de las tablas antes del descanso, sin resultado.
A la reanudación, los visitantes siguieron a la carga, con tres saques de esquina, sin rematador. Con todo, el Ribadumia avisó con Hugo Soto, tras un error de defensa.
Llegaron los cambios y más oportunidades para los de casa, sobre todo en una ocasión de Charles a servicio de Diego Abal. Al Estudiantil comenzó a agobiarle el reloj y arriesgaron cada vez más.
Con todo, las oportunidades más claras eran para el Ribadumia.
A balón parado, en el 72, Javi Domingo haría el 2-0 final, tras un córner bien lanzado por Cerqueiras, a remate de Charles y empujado finalmente por el artífice del segundo.
