
La campaña “Únete al apagón” es solo una parte de las medidas que tiene previsto adoptar el Consorcio do Comercio do Salnés, respecto a bancos y administraciones. De hecho, la entidad ya ha decidido romper relaciones con Novagalicia Banco con la que vienen suscribiendo acuerdos de colaboración desde hace años. Sienten que no está ofreciendo el apoyo que ahora más que nunca necesitan y, a mayores, “non estaban respetando o convenio”, según su presidente.
Marcos González recordó que mediante estos acuerdos, la entidad ofrecía ventajas para los socios del Consorcio y sus clientes. Así, hizo mención al recargo que asumen los comerciantes cuando un cliente abona sus compras con tarjeta porque, según él, Novagalicia Banco no le está cobrando el mínimo, como habían acordado. También detectan incumplimientos respecto a la Tarjeta Comercio con la que los clientes tenían facilidades “e non pagaban nada por ela pero ahora cóbranlles”, añadió.
El presidente explicó que los supuestos incumplimientos se vienen produciendo desde la fusión de las cajas. El último convenio acaba de expirar y no lo renovarán, de hecho, ya están negociando con otras entidades financieras a las que también planteará las reivindicaciones que defiende con el apagón de escaparates y colocación de esquelas que iniciaron el lunes.
Según González, la campaña está siendo un éxito y el jueves, cuando llegue a su ecuador, solicitará a los presidentes de las asociaciones locales de comercio que realicen una valoración de la repercusión en sus municipios. No obstante, cree que Cambados, Vilagarcía, O Grove y A Illa son las que mejor están respondiendo, en lo que a sus calles más comerciales se refiere; y echó en falta un poco más de apoyo en Dena –cogollo comercial de Meaño– aunque espera que entre ayer y hoy se vaya sumando algunos más.
anécdotas
También destacó la participación de firmas internacionales, como una empresa de paquetería que luce la esquela en sus furgonetas; y como anécdota, que la asociación isleña estaba tan ocupada en avisar del apagón que se olvidó de hacer lo propio con el rótulo de su local social.