
El centro cultural de Vilaxoán acogió ayer el sentido y sencillo homenaje a uno de sus vecinos más queridos y apreciados, Ramón Soto “Pimienta”, que perdió la vida en un accidente marítimo hace poco más de un año.
En un acto marcadamente político, organizado por IU y el Partido Comunista, en los que él había militado y participado activamente, sus camaradas fueron recordando los distintos momentos vividos a través de imágenes que casi sin querer hicieron un perfil de su amigo.
El primero en tomar la palabra fue su gran amigo y compañero Teo Cardalda quien precisamenet compartió con Ramón Soto esa fatídica noche en la que perdió la vida. Visiblemente emocionado, hizo una semblanza de su carácter: Sencillo, humilde, coherente y solidario. “Este mar de Arousa deixouno sen un soplo de vida. Veu de volta navegando connosco ata terra entre lamentos, choros e queixumes que se escoitaban nos postos de mando dos remolcadores”, recordó. “En Vilaxoán seguen chorando os seu sorrisos”.
El catedrático Xesús Alonso Montero también destacó de “Pimienta” como un hombre “nobre, limpo e transparente”. Así, resaltó que “Pimienta non vai a pasar á letra grande dos libros, pero mal lle iría ao mundo se non contase con xente coma él”.
Tambien el líder vilagarciano de Izquierda Unida, Juan Fajardo, quiso dar una pincelada sobre su amigo. “Este é sen dúbida un dos días máis complicados para falar en público”, así inició su intervención para luego destacar su marcado compromiso social. “
Facía o que tiña que facer e estaba onde tiña que estar ese era o segredo da súa coherencia”, dijo. Pero también recordó una de sus últimas conversaciones. “Díxome no Filipino, Juansiño temos que facer algo, queren acabar con nós e canta razón tiña”. También aseguró que “ dende hoxe daremos un Premio a Loita Obreira que levará o nome de “Moncho pimienta, a unha vida de loita”.
La actuación de Quenlla, reivindicativa y siempre combativa, y puso el broche de oro al homenaje a Ramón Soto.