El Grupo Garavilla anunció ayer que en las próximas semanas se comunicará a un nuevo grupo de empleados la solicitud para su incorporación a la planta de O Grove como ya lo hizo la totalidad del área de administración y comercial y el próximo lunes lo hará el primer grupo de operarios del área de producción.
En un comunicado de prensa la empresa quiere manifestar que el traslado de la planta de Vilaxoán tiene un carácter irreversible y que continúa dando los pasos previstos para su culminación en el menor tiempo posible.
Así, señala que la producción de Cuca se verá favorecida por la complementariedad de servicios comunes, el mejor aprovechamiento de las materias primas y por disponer de unas instalaciones más modernas y flexibles, que permitirán el incremento de producción cuando lo exija el mercado.
En esta línea, aseguran que el traslado de todo su personal, la maquinaria que actualmente se utiliza en el proceso, y la utilización de las mismas materias primas y suministradores de la comarca garantizan el mantenimiento de la calidad de los productos Cuca.
“Como ya se ha reiterado en el proceso de traslado están garantizados el cien por cien de los puestos de trabajo con las mismas condiciones y garantías que en la actualidad”, señalan.
Además, apuntan que las trabajadoras de la planta de Vilaxoán percibirán una media de 700 euros anuales en concepto de primas de productividad, igualando las condiciones que tienen en este momento los empleados de Garavilla en O Grove.
En cuanto a los plazos manejados, aseguran que Cuca está acelerando al máximo el proceso de traslado no solo por razones de carácter industrial y empresarial, sino también porque quiere que sus empleados estén el menor tiempo posible en situación de ERE temporal, con el perjuicio que esto supone en sus nóminas, durante los meses de duración del mismo.
Por estas razones, el grupo asegura que no entiende “los motivos que llevan a algunos representantes sindicales a intentar dilatar esta situación, perjudicando económicamente a los trabajadores, privando de información directa del proceso a los empleados, desinformando sobre las intenciones reales de la compañía y negándose a negociar aspectos de interés para los empleados como es el sistema de transporte a O Grove o unas posibles compensaciones económicas del traslado como ya ofreció la empresa en la última reunión del periodo de consultas”.
Cabe recordar que la empresa aseguró hace unas semanas que Cuca llevaba cerrando los últimos cinco ejercicios en números rojos y que ya ha trazado un plan para mejorar esta situación y que pasa por introducir los productos “delicatessen” en nuevos mercados donde la crisis económica no se siente de la misma manera. “Estamos acostumbrados a subidas y bajadas en un negocio, pero no estamos preocupados con las cifras de Cuca. Sabemos que pueden mejorar”, señalan.
