La villa registra el cuarto olor a gas “misterioso” en un mes en Otero Pedrayo, a 50 metros del lugar habitual
La localidad ha vuelto a registrar un olor a gas de origen indeterminado. Esta vez no ha sido precisamente en la calle Emilia Pardo Bazán –donde se registraron hasta dos episodios– sino en Ramón Otero Pedrayo, ubicada a unos 50 metros. Según Protección Civil, las mediciones realizadas con el explosímetro dieron negativo, es decir, no había contaminación en el aire. No obstante, en las últimas horas tuvieron que acudir dos veces a la zona por este mismo motivo.
Fuentes de la agrupación de voluntarios explicaron que recibieron el primer aviso el martes por la noche y el segundo en la mañana de ayer. En ambos casos, los testigos aseguraban la presencia de un olor similar al del butano en el ambiente. Sin embargo, no se detectó la presencia de gas alguno y el caso pasó a manos de la Policía Local que tenía previsto avisar a los técnicos nuevamente.
Su procedencia no está clara pero los testigos indicaron que ganaba intensidad en una arqueta.
El caso es muy similar a los dos de Pardo Bazán y al de la calle San Gregorio. El primer episodio ocurrió en enero y obligó a los vecinos del número 18 de la primera calle a salir de sus casas en plena noche. Esta sufrió un segundo episodio al mes siguiente y en la misma semana se produjo otro parecido en San Gregorio. El origen y composición del olor no pudo ser determinado por los técnicos, tal y como reconoció el propio alcalde. Sin embargo, hace unos días que no se volvían a repetir hasta ayer y crece la inquietud entre los residentes en la zona, es creciente.