
La junta directiva de la Cultural de Vilalonga lleva tiempo advirtiendo de las numerosas deficiencias que acumula esta edificación. El viernes el inmueble dio una prueba mal de su mal estado.
Alrededor de seis metros cuadrados de falso techo, del Aula Didáctica, se desplomaron sin causar ningún herido, a pesar de que el siniestro se produjo en una sala utilizada habitualmente para impartir clases de gimnasia, informática e inglés, entre otras actividades.
En el momento en el que los soportes cedieron y las planchas cayeron al suelo no se encontraba nadie en el local, ya que los desperfectos se produjeron a primera hora de la mañana.
La intensa lluvia de este invierno y las filtraciones que presenta la cubierta de este inmueble parece ser que han sido las causas que hicieron que los soportes que sujetaban las planchas de escayola, cediesen y se desprendiesen de la cubierta.
Lo ocurrido el viernes es interpretado por la directiva de la Cultural de Vilalonga como “un aviso” de lo que puede ocurrir si no se acometen las obras necesarias.
El colectivo lleva ya tiempo advirtiendo que tanto la Cultural como el Club de Jubilados de Vilalonga comparten realizan sus actividades en un espacio que no reúne las condiciones necesarias.
El propietario del inmueble entiende que realizar la reforma no es competencia suya, y la Cultural carece de los fondos necesarios para hacerlo. Por ello, hace ya algunos meses comenzaron a llamar a las puertas de las administraciones buscando respaldo. Pero no todas se han abierto.
A principios de diciembre el presidente de la Diputación, Rafael Louzán, visitaba la Cultural para ver la situación real de las instalaciones y entregar a la Cultural una subvención de 18.000 euros. Con esta cantidad pretendía contribuir a una obra que incluye la reforma de los baños y la renovación de los techos de uno de los salones. Pero la cantidad es insuficiente. La directiva calcula que necesita al menos otros 15.000 euros para poder acondicionar el local en condiciones. Y ese dinero no llega. Por ello, las obras no comienzan. Y es que es complicado en los tiempos que corren que una empresa empiece un trabajo si quien le contrata no le garantiza que disponga de todo el efectivo necesario para abonar la totalidad de lo que se ejecute. A medias tampoco lo pueden dejar.
La Cultural de Vilalonga, ubicada en el antiguo cine de esta parroquia, un edificio que ya ha cumplido los 35 años, es el referente cultural de esta parroquia. A su intensa agenda de bailes y fiestas hay que sumar la oferta que presenta a nivel de cursos y actividades complementarias.
Al igual que los alumnos del Cruceiro, los socios de la Cultural esperan desde hace años por los equipamientos de O Revel. A diferencia del colegio, el futuro centro sociocultural llegó a tener una estructura, un esqueleto de hormigón que desde hace años se ha convertido en una gran charca y en un criadero de ranas.
Paz Lago, concejala de Cultura, visitó el mismo viernes las instalaciones de Vilalonga, pero no confirmó apoyo alguno por parte del Concello para las obras que es necesario acometer.