
Los cambadeses pasaron ayer de las risas a las lágrimas. Y es que despedían a Don Carnal –compañero inseparable en los últimos días– con gran pesar, diciendo adiós a una fiesta que viven con intensidad como han demostrado con una alta participación en las actividades oficiales (concursos y desfiles), así como en las particulares (llegaron a representar una corrida de San Fermín con toros incluidos, aunque de “mentirijillas”). Eso sí, a pesar del dolor, lo hicieron a lo grande y como manda la tradición: quemando una ofrenda en su honor. Este año la temática elegida fue el “Ecce Homo” de Borja, aquel restaurado por una vecina de este pueblo zaragozano, Cecilia Giménez, y que dio la vuelta al mundo. También con el estómago lleno pues, un año más, las Amas de Casa “Albariño” ofrecieron una degustación de postres típicos de Entroido que hicieron las delicias de los presentes.
No faltaron las “plañideras” de todas las edades y sexos. Vestidas de riguroso negro estuvieron velando al “Ecce Homo” en la Praza do Concello hasta que llegó la hora de iniciar la marcha de la comitiva fúnebre hasta la playa de San Tomé, donde el “finado” fue quemado para disgusto del pueblo. Ni tampoco la lectura de los responsos y la extrema unción para el “difuntiño” antes de partir hacia su destino final.
Sí hubo ausencia de esquela este año. Algunos echaron de menos una letanía, una motivación escrita de porqué quemar al “Ecce Homo” más popular de los últimos tiempos; o como despedida, tras tantos titulares en los medios de comunicación. No obstante, la falta tampoco empañó el ambiente festivo de la cita pues muchas eran las lágrimas de cocodrilo que ayer se vertieron en la capital del albariño por este singular personaje, que se presentó en “cuerpo” y “cuadro”.
La villa despedía así al Entroido pero sin apartarlo de su mente pues muchos ya están pensando con qué disfraz sorprender en 2014; y otros incluso no tardarán mucho en empezar a construir sus carrozas. No es de extrañar que empiecen con un año de antelación tras haber visto la espectacularidad de los montajes de esta edición.