Conservas Pérez Lafuente rinde homenaje a dos empleadas jubiladas tras 50 años de dedicación
María Josefa y María Jesús se incorporaron a la empresa con 14 y 15 años

Conservas Antonio Pérez Lafuente rindió homenaje a dos trabajadoras esenciales que, tras cinco décadas de entrega y compromiso en la empresa familiar, inician su jubilación: María Josefa y María Jesús.
Ambas, nacidas en el año 1960, se incorporaron a la empresa siendo apenas adolescentes, en septiembre de 1974 y 1975 respectivamente, con solamente catorce y quince años de edad, teniendo sus padres que acompañarlas a la firma del contrato. Desde entonces formaron parte activa de la historia de esta conservera vilanovesa, contribuyendo con su esfuerzo y conocimiento al crecimiento y evolución de la compañía.
La dirección les hizo hecho entrega de una Camelia de plata, el reconocimiento conmemorativo que desde hace años reciben las empleadas al finalizar su etapa profesional en la conservera, símbolo del respeto y agradecimiento a tantas décadas de fidelidad y trabajo.
Según explican desde la empresa, tanto María Josefa como María Jesús encarnan el espíritu de la compañía: “tradición artesanal, compromiso y transmisión generacional de saberes”. Su historia se suma a la de otras compañeras que dedicaron décadas de esfuerzo y compromiso ininterrumpido a la misma conservera.