Más de dos millones para ampliar aceras en la antigua PO-300 y humanizar Zacande
Meis llevará a Pleno la aprobación del proyecto, que contempla la mejora de la accesibilidad y medidas de calmado del tráfico

Meis llevará mañana a Pleno la aprobación de un proyecto para sustituir las actuales aceras de la antigua PO-300, desde el centro de salud hasta el núcleo de O Pazo, por sendas peatonales accesibles, además de crear una zona de plataforma única con medidas de reducción y calmado de tráfico –limitación a 30 kilómetros por hora– en el entorno del núcleo de Zacande, que pretende humanizarse. El proyecto fue redactado por Traza Territorio a través de una ayuda de 50.000 euros de la Diputación de Pontevedra como parte de la convocatoria del Plan Ágora. Se trata de una ambiciosa transformación del entorno, que asciende a más de 2 millones de euros, que el Concello tratará de acometer a través de futuras líneas de ayudas, con la posibilidad de poder ejecutar la amplia actuación en varias partes.
La alcaldesa, Marta Giráldez, explicó que las actuales aceras “son moi pouco accesibles”, siendo además muy estrechas para, por ejemplo, “andar cun carriño de bebés”. Por ello, el objetivo es tratar de mejorar la accesibilidad de esta zona, muy concurrida, con sendas en ambos márgenes de la calzada y una zona de plataforma única. Asimismo, se establecerán medidas de calmado de tráfico, con pasos elevados para la reducir la velocidad.
Asimismo, el proyecto incluye también el soterramiento del cableado y la renovación de las redes de saneamiento y pluviales; además del arbolado de la zona y la dotación de nuevo mobiliario. Una ambiciosa propuesta que tratará de modernizar esta céntrica zona. En total, la actuación compete a 1.120 metros longitudinales de esta carretera, entre el núcleo rural de Zacande y el de O Pazo, pasando por O Mosteiro. Tratando así de conectar de forma segura esta área con el núcleo urbano de O Mosteiro.
Así, el gobierno local, con mayoría absoluta, llevará mañana al Pleno la aprobación de este proyecto con la intención de poder dividirlo en partes para concurrir a futuras líneas de ayudas debido al millonario presupuesto de la propuesta, siguiendo así el ejemplo de otras actuaciones como la humanización de la Rúa Igrexa, en licitación y financiada con el Plan Extra.