Vilagarcía y Sanxenxo a solo un paso, gracias a las alcantarillas de la reforma de Conde Vallellano

Una curiosidad llamó la atención esta mañana de los que pasearon en el entorno de la Praza de Galicia. Y es que en la confluencia de Conde Vallellano, actualmente en transformación, con Arcebispo Lago, las tapas de alcantarilla que se colocaron lucen las letras del Concello de Sanxenxo. Un dato que no pasó inadvertido para los ojos más avispados.
Es la anécdota de una reforma que va a buen ritmo y se espera que esté lista antes del plazo previsto y que, en breve, cambiará no solo de aspecto, sino también de nombre. Pasará a llamarse Clara Campoamor con un doble objetivo: Dar una mayor visibilización a las mujeres en el callejero vilagarciano y cumplir con la Ley de Memoria Democrática, que obliga a retirar los nombres vinculados a la dictadura franquista.