
El Concello de Vilanova estrena nuevo archivo municipal. Se ubica en el bajo ya anunciado, adquirido por el Concello con financiación por unos 110.000 euros, en As Sinas. Y tras una reforma en la que se han invertido 190.864 euros. Diputación y Xunta financiaron el grueso de las actuaciones.
En la compra del bajo y en su reforma, el Ayuntamiento obtuvo fondos tanto de la Xunta de Galicia como de la Diputación de Pontevedra. Parte del gobierno local visitó las nuevas dependencias con representantes del gobierno autonómico y también de la institución provincial.
Con sus alrededor de 900 metros cuadrados construidos, "hay espacio de sobra", valora el alcalde, Gonzalo Durán, en la visita a este bajo, que en el pasado había pertenecido a los Charlines y que la Audiencia Nacional había embargado.
La documentación ha sido trasladada en su totalidad desde las antiguas dependencias del archivo, que hasta ahora ocupaba la planta alta de la plaza de abastos. Pese a que todos los fondos están ya en el nuevo local, "casi la mitad" de su espacio queda todavía por utilizar, lo que permitirá al Concello "usarlo para otros usos" y garantizar a largo plazo el ordenado mantenimineto del archivo.
El regidor recordó que esta actuación era el "paso previo" a la reforma que ahora se proyecta en el edifico de la plaza de abastos. En la planta alta, como se avanzó hace unas semanas, se creará un gran espacio o mercado de puestos de comida para llevar. Durán adelantó hoy, además, que en breve su ejecutivo presentará otro proyecto para el edificio de abastos.
La financiación
La compra del bajo se realizó con una inversión de 110.000 euros, de los que la Xunta aportó el 80 %. Del 20 % restante se hizo cargo el Ayuntamiento, si bien echó mano para ello del Plan Concellos de la Diputación de Pontevedra.
Esta institución provincial concedió posteriormente, a través del Plan ReacPon, una partida de 190.864 euros para acometar la reforma integral de las instalaciones. Con tal motivo, los diputados Carlos Font y Santos Héctor acompañaron al alcalde en una visita para comprobar el resultado de los trabajos.

Las reforma y los nuevos espacios
Las obras permitieron el refuerzo estructural del bajo, así como la reforma de la cubierta y la envolvente, incluyendo albañilería, carpinterías, pavimentos, techos y acabados, consiguiendo mejorar las condiciones de aislamiento de la instalación, la seguridad y la estética del local.
Interiormente se diferenciaron cuatro zonas para el desarrollo del servicio, estableciendo un espacio común destinado a archivo, otro para la recepción, el tercero para sala de consultas y, por último, la zona de los aseos.
Finalmente, se realizaron instalaciones de electricidad, fontanería, contra incendios, ventilación, telecomunicaciones y videovigilancia, completando así los servicios de la edificación. Para el alumbrado se instalaron leds, de bajo consumo.