
El alcalde de A Illa de Arousa, Luis Arosa, y la diputada socialista Paloma Castro visitaron ayer el colegio Torre del municipio para demandar a la Xunta una actuación de calado en el centro. Lamentan que, con más de cincuenta años a sus espaldas, este CEIP nunca ha recibido una actualización profunda y sigue con graves deficiencias, como la presencia de deterioradas cubiertas de uralita con amianto y constantes goteras.
“Os nenos arousáns teñen dereito a estar ao mesmo nivel e nas mesmas condicións de igualde” que aquellos que residen o van a centros de municipios donde gobierna el PP, indicó la diputada socialista. El regidor sugirió la misma idea: que en A Illa y en materia de Educación “a Xunta non está nin se lle espera”. El primer edil sigue pendiente de respuesta a la petición de reunión con el titular de la Consellería. Entretanto, el grupo socialista en O Hórreo ya ha registrado una iniciativa parlamentaria para llevar esta cuestión a debate en la Cámara autonómica.
Arosa hizo un resumen de las principales necesidades que mantiene el centro. El llamado pabellón de Quinto carece de accesibilidad, lo que limita el uso por alumnos con movilidad reducida.
El pabellón antiguo de dirección es el que todavía tiene amianto “e baños dos anos 50, sen condicións seguras para o alumnado e profesorado”. El pabellón nuevo sufre goteras persistentes.
En cuanto a las antiguas casas de maestros, cuatro de ellas están a punto de ser reformadas para ganar espacio. Pero lo harán sin dinero de la Xunta. El Concello destina a esto 150.000 euros del Plan +Provincia de la Diputación de Pontevedra.
El alcalde lamenta que el Ayuntamiento tenga que poner estos fondos para una actuación en el recinto escolar que, insiste, debería financiar la Xunta. “Noutos concellos doutra cor política a Xunta si as amaña”, criticó ayer.
Los socialistas seguirán planteando además otras demandas isleñas, como el arreglo del paseo de O Cantiño.