
Un equipo de la Guardia Civil de Milladoiro investigó a una vecina boirense por una presunta estafa dentro del ámbito de la ciberdelincuencia a la octogenaria a la que cuidaba. La investigación se inició cuando la hija de la víctima acudió al cuartel del instituto armado de Boiro para denunciar que había consultado la cuenta bancaria de su madre y que había observado multitud de operaciones extrañas o fraudulentas, sabiendo fehacientemente que su progenitora no las había podido realizar. Finalmente se pudo constatar que la cantidad estafada ascendía a 34.800 euros y que esas operaciones se habían llevado a cabo en los dos últimos años.
El equipo de Milladoiro especializado en ciberdelincuencia procedió a la realización de la actividad operativa para tratar de localizar a la persona autora de dicho delito, y como resultado de esa labor comprobó que había una cuidadora de la mujer de 80 años, que prestaba sus servicios durante las mañanas y que, tal y como ya informó hace días este periódico, podía tener acceso a la tarjeta de drédito de la mujer. Los cargos con la misma se efectuaron en gasolineras, restaurantes, estancos y tiendas de ropa, así como retiradas en cajeros automáticos.
El instituto armado pudo constatar que los cargos durante esos dos años se realizaron siempre en horario de mañana y en Boiro. Con toda la información recabada, los investigadores procedieron a la investigación de la empleada de hogar, que gozaba de gran confianza en la familia al llevar 10 años contratada, como autora de las operaciones denunciadas como fraudulentas. Las diligencias instruidas fueron remitidas al juzgado de guardia de Ribeira.