Decenas de barcos acompañan la procesión marítima del Carmen en la clausura de las fiestas de Abanqueiro

La parroquia boirense de Abanqueiro bajó ayer el telón de sus recuperadas fiestas en honor a la Virgen del Carmen con el denominado día grande, en el que se ofició una misa solemne al aire libre en el muelle de O Bodión, que estuvo cantada por el coro parroquial y que contó con las actuaciones de A Dorniña de Abanqueiro y del grupo de gaitas Estroupele, así como con la asistencia de la conselleira do Mar, Marta Villaverde, que también acompañó a la procesión marítima, en la que la imagen de la patrona de la gente del mar la portó el bateeiro “Maristelle I” y la de San Cristóbal en el barco “Fajardo II”.

A la llegada a la Punta de O Chazo de los barcos participantes en el desfile por mar, entre los que había media docena de bateeiros y más de una decena de embarcaciones de recreo, se produjo un encuentro con otro barco que portaba una talla de la Virgen del Carmen. Allí se hizo la ofrenda floral en recuerdo a los fallecidos en el mar. Allí, Raquel Outeiral Blanco hizo también su ofrenda con un adorno floral por su padre, Miguel, fallecido en enero pasado, y de su tío José Ramón, que murió en el año 2014, y que destacó de ambos que eran dos grandes colaboradores de esta fiesta, implicándose en la decoración del arco del altar, así como en la realización de la petitoria por las casas para la finalizaicón de las actividades de esta celebración, y para los que tuvo un recuerdo muy emocionado.