La historia de Tania Álvarez va mucho más allá de la piragua. A sus 12 años ingresó en el Centro de Tecnificación Deportiva de Pontevedra con la ilusión de dejar su nombre escrito en la historia del piragüismo. Lo que no se podía imaginar es que a día de hoy estaría levantando un oro mundial junto a su eterna compañera de batallas, Tania Fernández.
Una medalla de oro más, ¿cómo se siente tras su paso por Györ?
Llegábamos con el cuarto puesto del año pasado y mucha ambición, nos esperábamos una medalla, pero no nos imaginábamos el oro. Estamos muy contentas.
¿Recuerda sus inicios en el piragüismo?
Sí. Soy del Grove, de un barrio marinero, me inicié como todos los niños, un verano probé en el Breogán junto con Natalia García y lo que empezó como un hobbie pues poco a poco se fue convirtiendo en algo más. Te preguntas, ¿y si voy al Centro de Tecnificación?, te vas dando cuenta de que puede ser algo más.
¿Cómo fueron sus inicios en el Centro de Tecnificación?
Entré con 12 años becada como residente. Es algo progresivo, sabes que los buenos deportistas salen de ahí. Yo guardo muy buenos recuerdos de esa etapa. Tenía a Valladares y a Tono Campos de entrenadores, y además sabía que el agua en O Grove es más inestable porque nos perjudica el norte. En Pontevedra tenía otras facilidades. Además, me dio muchos valores para la vida como son la disciplina y la constancia.
En el Breogán hay muchos referentes, ¿es Tono Campos uno de ellos para usted?
Sin duda. En aquel entonces él tenía 20 años y claro, necesitaba trabajar en verano, así que cogió a un grupo de infantiles entre los que estaba yo. Siempre digo que no conseguiría nada si no fuera por la ayuda del grupo que hacemos, no solo con Tono, sino también con Diego Romero y los demás. También en cuanto a referentes el Breogán en el lado femenino tiene a Joaquina Costa, campeona de K4 en Barcelona en el 92, o el propio Mascato o Diego Domínguez. Es la cuna de los buenos deportistas.
¿Se ve como Tono Campos subida a la piragua a los 40?
No (risas). No lo creo. Quiero ser madre y creo que sería incompatible. Por el momento vamos poco a poco, viendo año a año cómo van las cosas. Me puse hasta los 35 para ser madre, y continuar supondría contar con unas ayudas y facilidades que no sé si voy a tener. Es muy complicado. Me tengo puestos ciertos años de límite pero no lo sé, no sé si a los 40 seguiré en la piragua.
Las Tanias ya son más que leyenda, ¿cómo se forjó esta gran dupla?
Nos conocimos en el Centro de Tecnificación. En el año 2018 nos juntamos en Maratón y después el entrenador nos planteó la posibilidad del K2. Pensé en ella porque la veía como la mejor compañera, porque yo voy cómoda atrás y necesitaba a alguien buena delante. Además nosotras vivimos cerca porque ella reside en Tui y yo en O Grove. A veces entrenamos en Pontevedra, otras voy yo a Tui o viene ella aquí. Vamos semana a semana.
¿Cree que hay cantera en España para cubirlas a ustedes?
Sí. Nosotras no fuimos al Campeonato de Europa el año pasado y España tuvo representación femenina que quedó en buen lugar.
Es usted una mujer todoterreno, ¿cómo compagina el deporte con todas sus obligaciones educativas?
Pues me apunté a un máster este año, ya me estoy arrepintiendo (risas). Creo que al final todo es cuestión de organización. Esta semana para mi se acabó el deporte de alto rendimiento, intento que no me coincida todo con el período lectivo.
¿Cómo lleva la docencia?
Pues este año tengo todas mis horas lectivas en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte durante los primeros meses del cuatrimestre. Intento organizar los entrenamientos en base a las clases para que no me coincida.
¿Cree que le condiciona a la hora de entrenar?
No. Tampoco cambiaría nada. Es como tener una vida paralela, que a mi me ayuda para no estar seguido pensando en el piragüismo.
¿Siente el cariño de O Grove?
Sí. Tengo la suerte de ser una chica muy transparente. Ahora soy Tania la campeona del mundo, pero en unos días volveré a ser la Tania de siempre, no eres más que nadie por las medallas que tengas. Siento el calor de la gente. Me hubiera gustado que a nivel institucional se me hubiese reconocido más, pero bueno, cuestión de política.
¿Cuándo volverá a entrenar?
Volveré a la piragua en unas cuatro o cinco semanas, necesito un respiro. Seguiré con una vida activa porque yo no puedo parar del todo. Es importante no olvidar la fuerza para no perder forma. También haré escalada, surf... algo que en temporada te da más miedo hacer por si acaso.
El próximo objetivo
Tras la medalla de oro en Györ, “las Tanias” se tomarán un pequeño respiro antes de volver a la carga, con la mira puesta en el que podría ser su siguiente viaje, Argentina. El Campeonato del Mundo de Canoa se celebrará el próximo mes de octubre de 2026.
Aunque aún se encuentren asumiendo el oro, ¿cuál será su próximo objetivo?
Argentina (risas). Creo que es un viaje que va a valer la pena. Nosotras ya fuimos a China juntas. Esta fue una temporada diferente porque el europeo fue en junio, entonces se adelantó un poco la temporada. El año que viene es en octubre, entonces dará tiempo a tener todo bien planeado.
¿Se conocen ya cuáles serán los criterios de selección de la Federación Española?
No. Todavía no se conocen, pero tienes que pasar muchos filtros para conseguirlo, no te vale solo con ser campeona mundial como somos las tanias ahora mismo. Ahora lo importante es lograr la clasificación
