el recorte a la mitad previsto en la producción de aceite de oliva de Andalucía augura un escenario de precios altos para el consumidor y de dudas sobre la rentabilidad. Los precios partían ya de unos niveles altos después de su recuperación hace un par de campañas, pero al aumento de los costes de producción se han unido últimamente la sequía, el calor y la escasez de lluvias, factores que explican la previsión de una campaña corta y escasa. Los gallegos tendrán que volver a la dieta tradicional de elaborar alimentos a base de su cocción. Algo que también dicen que es sano y no engorda tanto con las fritangas.
