Ya que salir de Galicia en tren todavía es una odisea según cuál sea el destino, parece que el Gobierno tiene a bien facilitarnos la movilidad interior. Estudia, según dice el ministro Puente, una red de Cercanías en A Coruña. Podríamos ir a Culleredo, a Betanzos o a Ferrol igual que los madrileños van a Aranjuez o a Tres Cantos. Es tan bonito que no parece real. Y probablemente nunca lo sea.
